Actualmente la venta de bebidas alcohólicas es uno de los negocios que genera mayores ingresos, gracias a eso se convierte en una alternativa atractiva y rentable. En casi cualquier país del mundo el consumo es alto y tiende a subir en épocas de vacaciones y festividades. Una distribuidora de licores Bogotá es una excelente oportunidad de negocios que por sus grandes beneficios se debe considerar.
Bien sea desde la perspectiva del cliente o del empresario, acudir a una distribuidora puede resultar en grandes ventajas. Diariamente muchas personas necesitan comprar licor por diversas razones, es por ello que este negocio siempre está activo y generando ganancias. Es un mercado que tiene demanda constante y trabaja todos los días, ahí una de las razones de su atractivo.
Desde la perspectiva del cliente, lo importante es la presentación, por este motivo mantener el local y todos los activos que dentro de él se encuentren en buen estado es prioridad, lo ideal es causar buena impresión para que la persona siga acudiendo, lo que poco a poco creará un vínculo de confianza que se verá reflejado con clientes que se mantienen comprando una y otra vez.
Para el empresario es una suculenta inversión, gracias a todos los beneficios que ofrece. Demanda diaria de licores o incluso de otros productos que se vendan en la misma, además, el hecho de que exista una demanda diaria, convierte a las distribuidoras de licores en alternativas de negocios ideales para generar crecimiento, siempre y cuando se maneje de forma adecuada.
Los licores más consumidos por los colombianos son la cerveza y el whiskey, así mismo sucede específicamente en Bogotá. Según estudios realizados, más del 60 % de los bogotanos consumen cerveza y aguardiente, mientras que un 30 % prefieren whiskey y el restante vino y otras bebidas coloquiales.
El aguardiente es una bebida tradicional del país que se suele beber en ocasiones especiales como festividades o celebraciones. Este licor está hecho a base de anís y caña de azúcar, en algunas regiones de Colombia se conoce como “antioqueño”. Se toma en pequeñas copas o se mezcla con otros licores o bebidas para la creación de cocteles.
Un negocio que acompaña a la venta de licores, es la distribución de cigarrillos, según investigaciones se estima que solamente en Bogotá hay una población de más un millón y medio de fumadores que, por lo general, acompañan una bebida alcohólica con un cigarrillo con el fin de entrar en confianza.