¿Te gustaría anima a un amigo o a un ser querido a iniciar una actividad tan gratificante como la jardinería de la manera más agradable posible? Siempre puedes, si lo deseas, hacerle un regalo apropiado por su cumpleaños o por Navidad; es decir, una planta sencilla de cuidar, unas semillas que pueda plantar, o incluso, algún tipo de abono orgánico ecológico de calidad que pueda utilizar en algún momento de su vida. Claro que, antes de tomar esta decisión, es importante asegurarse de que, en el fondo, la jardinería en casa es una afición que a esa persona le resulta atractiva. Porque las flores y las plantas y los árboles, como los perros, los gatos o los animales en general, son seres vivos, y como tal merecen respeto y cuidados.
Es decir, responsabilidad, lo que incluye, de hecho, investigar a fondo cómo y de qué forma debemos plantar una semilla, bajo qué condiciones de luz solar debe crecer la especie que hemos decidido hacer germinar, cuántos niveles de agua le hacen falta y con qué frecuencia, y, por supuesto, cuál es su tipología de abono ecológico más ideal. Quienes aún no sepan mucho respecto a este hobby tal vez piensen que cualquier abono sirve, que todos los tipos de fertilizantes del mercado, en función de su objetivo primordial, es decir, fertilizar el suelo, permiten que una planta crezca. Pero, si bien es cierto que hay clases de abono que sirven para especies similares entre sí, hay especializaciones precisamente debido a la enorme diversidad de flora que hay en todos los sentidos.
Lo sabremos si, antes de hacer el mencionado regalo, decidimos indagar un poco y aprender conceptos de jardinería básicos, nosotros solos o, mejor aún, junto con la persona obsequiada. Descubriremos, por ejemplo, que existen incluso abonos de cannabis; y que, aunque a priori la lógica no nos indique lo contrario, de hecho existen fertilizantes industriales que no son precisamente ecológicos. Pero si realmente nos gusta la idea de hacer crecer flores o plantas, debemos abrazar también una serie de valores éticos esenciales. Empezando y terminando, ya para concluir, por la adquisición de los fertilizantes más ecológicos del mercado.