Alrededor del 6% de los accidentes de tráfico se deben a fallos en los vehículos involucrados. Es por ello que se necesita hacer una revisión periódica para comprobar su estado.
La ITV es importante para asegurar que el vehículo está en condiciones óptimas para circular, garantizando la seguridad del conductor y los demás. También es la manera de saber si el coche cumple con los estándares actuales para tener el mínimo impacto posible en el medio ambiente.
Superando la ITV
Aproximadamente el 30% de los ciudadanos ha circulado en su coche sin haber pasado la inspección, dato que se incrementa hasta el 60% en el caso de motocicletas y ciclomotores.
La ITV no es una tasa más que pagar del coche sino, más bien, un procedimiento que garantiza la seguridad en la carretera que todos deberían seguir. Y se trata de un requisito de obligado cumplimiento para poder circular.
Por otro lado, el coche tiene más posibilidades de no pasar la inspección, a medida que aumenta su antigüedad, es por ello, que las revisiones en la ITV hay que realizarlas cada menos tiempo. Se debe sobre todo a la falta de mantenimiento y los nuevos requisitos mínimos sobre las emisiones de gas. Lo que se puede hacer es invertir en reparaciones para mejorar el estado del vehículo.
A pesar de que los costes de mantenimiento y reparaciones son relativamente altos, no justifican el riesgo que conlleva no estar al día con la ITV. Según AECA-ITV, estas inspecciones evitan casi 30.000 siniestros cada año.
Se puede circular con la ITV caducada?
No. Conducir sin haber pasado las revisiones se sanciona con una multa de hasta 500 euros, aunque no se pierden puntos en el carnet de conducir.
Las inspecciones son obligatorias, en caso de no hacerlas en la fecha indicada, te enfrentarás a una sanción por circular con la ITV caducada. A 30 días de la fecha de vencimiento de la actual, puedes pedir una cita en la estación más cercana a través del teléfono 11890.
Es importante saber que tampoco es posible circular con el documento vencido, incluso teniendo ya una cita previa solicitada. Es por ello que se necesita hacer la planificación de la revisión con suficiente tiempo y llevar todos los documentos.
La única excepción es que el coche se encuentre en circulación el mismo día de la cita y cerca de la hora porque se tiene que llevar para hacer la revisión. También se acepta que, por motivos ajenos al conductor, la cita se retrase, lo que también es una excepción a la regla.